
Muhammad Rayyan Taujoo, Estudiante, Jamia Ahmadiyya International Ghana
Traducido en español por Aesha Ijaz
Con solo unos días para el comienzo de Ramadán, vale la pena considerar nuestra condición espiritual y reflexionar críticamente sobre ella, para que podamos entrar con éxito en este mes bendito y obtener el máximo de sus bendiciones.
Antes de adentrarnos en el sagrado mes de Ramadán, debemos estar espiritualmente preparados para percibir su verdadera luz, y para ello, es necesario hacer algunos preparativos. Surge entonces la pregunta: ¿Cómo podemos prepararnos para Ramadán?
Aquí tienes 9 pasos que te ayudarán en este gran esfuerzo.
1-Haz una intención firme
El Santo Profeta (sa) declaró:
إِِنَّمَا الأَعْمَالُ بِالنِّيَّ
"El premio de las acciones depende de la intención." (Sahih Bukhari, Kitab al-imaan, Bab ma ja’a anna al-amaal biniyyati wa al-hisbati wa li kulli imri’in ma nawa, Hadith 54)
Siempre que un musulmán desea rezar sus oraciones obligatorias, el acto de realizar la ablución sirve como la intención de la oración. De manera similar, el acto de ponerse el ihram simboliza el abandono de un estilo de vida lujoso y todas las ocupaciones mundanas, solo para estar completamente presente frente a Allah el Todopoderoso.
Esto muestra claramente que, detrás de cada acción, nuestra intención antes de involucrarnos en cualquier tarea es muy crucial. Así que haz una fuerte intención sobre lo que vas a hacer este mes.
2-Comprende la verdadera esencia del ayuno en el Islam
Hazrat Mirza Ghulam Ahmad, el Mesías Prometido (as), declara:
“El ayuno no es algo tan trivial como que el hombre simplemente permanezca hambriento y sediento; más bien, tiene una esencia y un efecto que solo pueden entenderse a través de la experiencia. Es parte de la naturaleza humana que, cuanto menos coma, más se purifique su alma y aumenten sus capacidades para experimentar visiones. La intención de Dios Todopoderoso con esto es disminuir un tipo de sustento y aumentar otro.
“Aquel que ayuna debe tener siempre presente que el propósito no es solo permanecer hambriento, sino mantenerse ocupado en el recuerdo de Dios Todopoderoso, para alcanzar un estado de desapego y separación [del mundo]. Así, el ayuno significa que el hombre renuncie a un pan que solo nutre el cuerpo y obtenga otro que es la fuente de satisfacción y saciedad del alma.”
(Malfuzat [inglés], Vol. 9, p. 43)
Si un musulmán simplemente observa los requisitos externos del ayuno, solo logrará hacerse pasar hambre y sed, nada más. Por eso, debe saber que la práctica del ayuno no es solo un ejercicio físico, sino también espiritual, cuyo objetivo final es alcanzar la complacencia de Dios.
3- Regula tu rutina para las cinco oraciones diarias
La oración (Salat) es uno de los pilares más fundamentales del Islam. Si no estás cumpliendo con este criterio de la mejor manera posible, es momento de ser más puntual con tus oraciones. Esfuérzate por realizar las cinco oraciones diarias. Si ya estás dando lo mejor de ti, quizás podrías hacer mejores resoluciones. Por ejemplo, intenta realizar las cinco oraciones obligatorias a tiempo y en congregación, como Allah dice en el Sagrado Corán:
إِنَّ ٱلصَّلَوٰةَ كَانَتْ عَلَى ٱلْمُؤْمِنِينَ كِتَٰبًا مَّوْقُوتًا
‘’Y cuando hayáis finalizado la Oración, recordad a Al-lah ya estéis de pie, sentados o tumbados sobre vuestros costados. Y cuando estéis fuera de peligro, cumplid la Oración de la forma prescrita; ciertamente la Oración se ordena a los creyentes para que sea practicada en los momentos prescritos.’’
También podrías intentar concentrarte más y reflexionar sobre los significados de las oraciones en el Salat.
4-Aumenta tu amor por el Sagrado Corán
Uno debería al menos intentar completar el Sagrado Corán una vez durante el mes, ¡así que prepárate! Tómate el tiempo para leer el texto árabe con su traducción. Reflexiona sobre sus significados e intenta, en la medida de lo posible, seguir sus instrucciones. Comienza de manera gradual, incluso si significa leer solo una o dos páginas.
Allah dice en el Sagrado Corán:
أَقِمِ ٱلصَّلَوٰةَ لِدُلُوكِ ٱلشَّمۡسِ إِلَىٰ غَسَقِ ٱلَّيۡلِ وَقُرۡءَانَ ٱلۡفَجۡرِ ۖ إِنَّ قُرۡءَانَ ٱلۡفَجۡرِ كَانَ مَشۡهُودٗا
“Cumple la Oración al declinar el sol y hasta la oscuridad de la oche, y recita el Corán en el alba. En verdad, la recitacióndel Corán al alba es especialmente aceptable para Dios.” (Surah Bani Israil, Capítulo 17, Versículo 79)
5-Caridad
La caridad es un acto muy apreciado a los ojos de Allah el Todopoderoso. Por lo tanto, se recomienda dar tanta caridad como sea posible antes de que comience el Ramadán para entrenarnos a gastar más en el camino de Allah el Todopoderoso una vez que comience este bendito mes. También era la costumbre de nuestro Querido Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dar más en caridad durante el Ramadán.
También es un mandato del Sagrado Corán que debemos gastar de lo que Allah el Todopoderoso nos ha provisto. Se dice en el Sagrado Corán:
وَفِىٓ أَمْوَٰلِهِمْ حَقٌّ لِّلسَّآئِلِ وَٱلْمَحْرُومِ
“Y en su riqueza hay una parte que corresponde al mendigo y al necesitado”.
(Surah adh-Dhariyat, Capítulo 51, Versículo 20)
Aumentar nuestra conexión con el Califa
Como Ahmadíes, somos enormemente bendecidos por estar bajo el esquema divino de la Jilafah. Por lo tanto, debemos fortalecer nuestra relación con el Califa, especialmente antes de entrar en el mes de Ramadán. Debemos escribir una carta a nuestro querido Califa y solicitar humildemente sus sinceras oraciones para que, con la gracia de Allah, podamos aprovechar al máximo el Ramadán.
Hazrat Mirza Masroor Ahmad, Hazrat Khalifatul Masih V, en su sermón del viernes del 29 de mayo de 2020, dijo que todos los Ahmadíes alrededor del mundo deben desarrollar estos sentimientos de dedicación y hacer todo lo posible para actuar conforme a las instrucciones del Califa. Existe una fuerte conexión entre el Califa y su Jamaat, y viceversa.
Por lo tanto, esta conexión debe ser fortalecida y valorada.
7-Mantener una dieta nutritiva
El cuerpo humano puede reaccionar cuando se enfrenta a cambios repentinos en los hábitos alimenticios. Algunos experimentan problemas digestivos durante los primeros días de Ramadán. Por lo tanto, se debe reducir gradualmente el consumo de alimentos algunos días antes de Ramadán, ajustando así el cuerpo a un nuevo horario de alimentación.
Alimentos como dátiles, frutas frescas, leche, yogur, huevos y frutos secos deben ser incluidos en la dieta antes y durante el Ramadán. Los platos recomendados para el Ramadán son: avena con frutas y frutos secos, pan con huevos hervidos, frutas frescas, sopas de verduras, tostadas integrales y leche baja en grasa.
8-Evitar perder el tiempo en las redes sociales
Los musulmanes deben tener mucho cuidado al usar las plataformas de redes sociales, especialmente durante el Ramadán. Las redes sociales muestran mucho contenido explícito, lo que pone en riesgo nuestra espiritualidad. Puedes empezar por dejar de desplazarte innecesariamente por las redes sociales y, en su lugar, enfocarte más en el istighfar (pedir perdón) y hacer todo lo posible por buscar el perdón de Allah el Todopoderoso.
Con respecto a esto, Hazrat Khalifatul Masih V, en su sermón, dijo:
"Los males de estos días incluyen la televisión y el Internet. Pueden observarse en la mayoría de los hogares que desde el mayor hasta el más joven no están ofreciendo la oración de Fajr a su debido tiempo, ya que estaban viendo televisión o navegando por Internet hasta tarde, viendo algún programa y, como resultado, no pudieron despertarse a tiempo. De hecho, tales personas ni siquiera se dan cuenta de que deben levantarse para la oración por la mañana.
"Tanto el Internet como la televisión y otras cosas similares que no tienen utilidad no solo hacen que te pierdas la oración una o dos veces, sino que aquellos que caen víctimas de este comportamiento adquieren el hábito de ver programas hasta tarde por la noche o de estar en Internet. Luego, se vuelve difícil levantarse para la oración por la mañana y [estas personas] pueden no siquiera despertarse [a una hora razonable]. Algunas personas finalmente dejan de darle importancia a la oración."
(Sermón del viernes 20 de mayo de 2016)
9- Paciencia y problemas de ira
La palabra “Islam” significa paz. Una enseñanza fundamental del Islam es difundir la paz en la sociedad y ser tolerantes con las personas que nos rodean. Se menciona en el Sagrado Corán:
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ ٱسۡتَعِينُواْ بِٱلصَّبۡرِ وَٱلصَّلَوٰةِ ۚ إِنَّ ٱللَّهَ مَعَ ٱلصَّـٰبِرِينَ
¡Oh, vosotros, los que creéis!, buscad ayuda con paciencia y Oración; ciertamente Al-lah está con los constantes.(Surah al-Baqarah, Ch.2: V.154)
El Sagrado Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo de manera similar:
“El ayuno es un escudo (o un refugio). Así que, la persona que esté ayunando debe evitar las relaciones sexuales con su esposa y no comportarse de manera tonta ni insolente, y si alguien pelea con él o lo insulta, debe decirle dos veces: ‘Estoy ayunando.’”
(Sahih Bukhari, Kitab al-Sawm, Bab Fadl al-Sawm, Hadith 1894)
Este Hadiz enfatiza la necesidad de controlar nuestros impulsos durante el Ramadán, pero debemos comenzar a trabajar en ello con antelación para que no se convierta en una carga para nosotros durante el mes de Ramadán.
Durante su sermón del viernes el 28 de abril de 2023, Hazrat Khalifatul Masih Vaa dijo:
“El Mesías Prometido (la paz sea con él) siempre enfatizó a sus seguidores que deben mostrar paciencia y recurrir a la oración. Dijo que si alguien no puede soportar la persecución de los opresores con paciencia, entonces es libre de alejarse de él. Es solo nuestra paciencia lo que ha hecho que la Comunidad Musulmana Ahmadi se distinga como única en el mundo.”
Huzoor agregó:
“Mostrar paciencia es el camino de los profetas, y esto es lo que el Mesías Prometido (la paz sea con él) nos ha enseñado, que debemos mostrar paciencia.”
En conclusión, el ayuno es una llave espiritual que puede permitirnos abrir las puertas del éxito celestial. Sin embargo, dado que el Ramadán está a solo unos días de distancia, debemos hacer algunas preparaciones espirituales y físicas para que sea más fácil para nosotros comenzar esta nueva rutina. ¡Que Allah el Todopoderoso acepte todos nuestros sacrificios y nos colme con sus mejores bendiciones en todos nuestros esfuerzos durante este bendito mes! ¡Amén!